Si en el Perú existen lugares en donde florecen diversas variedades de orquídeas, tales como en Machupicchu y Oxapampa por citar algunos, el “Bosque Nublado Amaru”, en la región Huancavelica”, se diferencia de todos por tener la más grande biodiversidad de especies, muchas de ellas nunca vistas, razón por la cual, está en los ojos de la ciencia.
Esta maravilla natural y potencialmente zona turística, tiene una extensión de 5 mil 048 hectáreas y se ubica en el distrito de Huachocolpa, provincia de Tayacaja, donde concentra alrededor de 204 especies identificadas y 100 por registrar.
De todas destacan algunas variedades que han salido a la palestra por tener características únicas y jamás imaginadas como la denominada “Bandera Peruana”, por llevar los colores de nuestros símbolos patrios y la orquídea que tiene la caña más larga, la misma que alcanza 14 metros para recién florecer en la parte más alta.
ÁREA DE CONSERVACIÓN. Por todas estas y otras bondades naturales y turísticas, el Gobierno Regional de Huancavelica (GRH), busca convertirlo en “Área de Conservación Regional” (ACR) y Área Protegida. La finalidad es impulsar no solo el turismo, sino proteger la flora, fauna y vida silvestre existente en el lugar, además de promover las denominadas estaciones biológicas para preservar las variedades que adornan este importante atractivo.
El gobernador regional, Maciste Díaz Abad, manifestó que el solo hecho de declarar el bosque en ACR, significará un gran impacto para la economía de los pobladores de Huachocolpa y de la región, inclusive, permitirá contar con guardabosques, cuya presencia ayudará a preservar la diversidad genética de orquídeas, caracterizadas por su tamaño, color y forma.
En estas labores, el gobierno regional cuenta con el respaldo del Ministerio del Ambiente a través del Servicio de Área Protegida del Ministerio del Ambiente. Es importante tener en cuenta que Huancavelica es la única región que no tiene área de conservación ni área protegida.
LAS EXPEDICIONES. Tras varios intentos de llegar al lugar, el 11 de febrero de 1999, se concretó la primera expedición científica hacia el Bosque Amaru. Estuvo integrada por los biólogos Marco León Martínez y Benjamín Collantes Meza, los ingenieros forestales Redén Suárez Gonzáles, Gissela Alegría Toscano y Francisco Tueros, quedando impactados por las novedades y la gran diversidad de especies.
Ese año se hicieron tres exploraciones científicas, abarcando también los meses de sequía para tener un panorama completo de la floración de las especies en Amaru. Luego se incorporó al equipo de investigación el biólogo Reynaldo Álvarez Grillo. Las investigaciones continuaron, incluso comprendieron los bosques de Chihuana.
Los días 1, 2 y 3 de marzo de 2020, una gran delegación encabezada por el gobernador Maciste Díaz, los biólogos Benjamín Collantes Meza y Marco León Martínez, además del ingeniero Gabriel Amaro Alzamora, llegó hasta el bosque, pero para quienes recorrieron por primera vez, fue toda una hermosa y grata aventura del cual, nunca olvidarán.