Un nuevo escándalo sacude a la Dirección Regional de Transportes y Comunicaciones de Junín, luego de que dos de sus funcionarios fueran detenidos tras descubrirse que un rodillo perteneciente a la entidad regional era utilizado en una obra privada de pavimentación en el asentamiento humano Justicia, Paz y Vida, en El Tambo, Huancayo.
Se trata de Rafael Gonzales Quispe, encargado de Infraestructura Terrestre, y Julián Raúl Cóndor Jesús, responsable de la Subdirección de Equipo Mecánico, ambos con facultades en la disposición y control de maquinaria estatal. De acuerdo con la Policía Anticorrupción, en horas de la tarde se constató que la pesada unidad laboraba en la mencionada obra, pese a que no existe convenio alguno que justifique su empleo, menos aún a favor de una empresa privada.
Lo que agrava la situación es que la pavimentación en Justicia, Paz y Vida no depende del gobierno regional, sino del Ministerio de Vivienda, Construcción y Saneamiento, que contrató a la empresa Mejesa para la ejecución del proyecto, valorizado en más de 19 millones de soles.
El hallazgo genera graves interrogantes sobre el control del patrimonio público y el posible favorecimiento irregular a contratistas privados. El uso de maquinaria estatal en obras que no son de su competencia configura presunto peculado de uso, delitos que hoy investiga la Policía Anticorrupción y el Ministerio Público.
La ciudadanía espera explicaciones claras de la Dirección Regional de Transportes de Junín y sanciones ejemplares, pues el caso revela, una vez más, cómo bienes públicos destinados al servicio de todos terminan siendo empleados en beneficio de intereses particulares.