El congresista Ilich López otra vez se encuentra en el ojo de la tormenta. Esta vez su excuñado lo sindica de haberlo utilizado como testaferro en una empresa de seguridad para beneficiarse de algunos contratos y ahora tras un proceso judicial por defraudación, lo dejó solo y pagando las consecuencias.
El caso fue presentado por el programa Cuarto Poder, y allí el denunciante Raúl Hurtado afirma que el ahora legislador le pidió ser el representante legal de la empresa de seguridad C.E.&G Sociedad Comercial de Responsabilidad Limitada, pero que en la práctica Ilic López era el propietario, y para ello presentó audios donde se le escucha conversar aparentemente con López Ureña.
Según su testimonio, el legislador no podía figurar en dicha empresa, porque ya tenía otra vinculada al rubro de limpieza y que mantenía contrato con la Universidad Peruana Los Andes (UPLA), entidad a donde también postuló con su nueva empresa de vigilancia.
Los problemas comenzaron el 2018 cuando la Sunat detectó maniobras tributarias fraudulentas en agravio del Estado por lo que abrió un proceso judicial, que acabó con una sentencia contra Raúl Hurtado, que incluyó el pago de una reparación civil de 200 mil soles. Desde entonces Ilich López lo abandonó.
LO NIEGA. En el mismo reportaje el congresista de Acción Popular negó que las grabaciones de audio tengan que ver con él y llamó delincuente a Raúl Hurtado. «Yo no tranzo con delincuentes», indicó al ser entrevistado por Cuarto Poder y anunció que lo denunciará, pues asegura que es víctima de chantaje.