El alcalde del distrito de Vizcatán del Ene, Alejandro Atao Guerreros y el juez de Paz del centro poblado San Migue del Ene denunciaron el asesinato de 18 personas, entre varones, mujeres y niños, más tarde el Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas confirmó la muerte de 14.
Según un acta de denuncia verbal, que fue dada a conocer por Fernando Rospigliosi y confirmada por algunos medios de comunicación nacional, ocurrió el pasado 23 de mayo a las 9:00 de la noche.
De acuerdo a los detalles de dichas autoridades locales, se dirigieron hacia el sector denominado Chimpinchariato, cerca a la orilla del río y en el lugar encontraron casquillos de bala de fusiles. En uno de los ambientes de un local, aparentemente una cantina, hallaron a tres cadáveres de varones.
El relato indica además que en un pasadizo hallaron el cuerpo sin vida de una mujer, mientras que al frente del caudal encontraron otros cuatro cuerpos de varones. «Caminando por la zona de caja se observó una humareda que provenía de cuatro cadáveres, entre ellos dos niños, calcinados, totalmente irreconocibles», indica el acta.
La mayoría de los cadáveres presentaban orificios de bala y numerosos panfletos esparcidos que señalaban «limpiar el Vraem y el Perú de antros de mal vivir, de parásitos y corruptos».