La Red de Estudios para el Desarrollo (REDES) identificó que el 59.6% de las instituciones educativas de Junín, equivalente a 1,995 colegios, requieren ser demolidos y reemplazados por una mala infraestructura. Esta problemática impacta a más de 77 mil estudiantes y refleja una significativa brecha en la infraestructura educativa, valorizada en más de S/9,971 millones, según datos del Ministerio de Educación (Minedu). Esta situación no solo compromete la calidad educativa, sino que también limita el acceso a un entorno de aprendizaje adecuado.
Recordemos que la brecha de infraestructura educativa se refiere a la diferencia en la calidad y disponibilidad de los recursos físicos y tecnológicos necesarios para ofrecer una educación adecuada. Esta brecha se manifiesta en aspectos como las instalaciones físicas, incluyendo edificios escolares, aulas, laboratorios y bibliotecas.
“La falta de infraestructura escolar adecuada afecta gravemente la calidad educativa, limitando el aprendizaje de los estudiantes. Aulas en mal estado, ausencia de recursos y la falta de acceso a servicios, crean un ambiente poco propicio para estudiar. Esta carencia perpetúa de desigualdades, produce una fuerza laboral menos calificada y obstaculiza el desarrollo regional”, comentó Dittmer Quispe, economista de REDES.
De acuerdo con el Minedu, las provincias con mayor porcentaje de instituciones educativas que necesitan ser sustituidas son Satipo (72.1%), Tarma (64.8%) y Concepción (59.2%). Por ejemplo, en Satipo, la brecha de infraestructura para la sustitución de colegios supera los S/3,032 millones, seguida por Huancayo, que necesita más de S/2,002 millones. Estas cifras subrayan la urgencia de abordar las deficiencias estructurales en el sistema educativo de estas localidades.
En Huancayo, los colegios que requieren un mayor presupuesto para el cierre de la brecha de infraestructura son el Politécnico Tupac Amaru y la Institución Educativa Nuestra Señora de Cocharcas, con un presupuesto de S/44 millones en ambos casos.
Además de esta situación, en 2023, sólo el 29.1% de los locales educativos en Junín contaba con acceso a servicios básicos como agua, electricidad y desagüe, de acuerdo con la información de la Unidad de Estadística de la Calidad Educativa (ESCALE) del MINEDU.
INVERSIÓN. A pesar de que el presupuesto público asignado a la educación por el Gobierno Regional de Junín ha alcanzado los S/911 millones en la última década, la tasa de ejecución promedio entre 2013 y 2023 fue de 74.8%. Esta ineficiencia ocasionó que se dejaran de utilizar más de S/229 millones, evidenciando una significativa carencia en la gestión de los recursos destinados a mejorar el sistema educativo.
Para el año 2024, el Gobierno Regional ha asignado un presupuesto de S/301 millones a fin de llevar a cabo inversiones en el sector educativo. Hasta agosto de este año, se ha logrado una ejecución del 79.9%, lo que, aunque es un avance, aún deja margen para mejorar.